Me puse a flotar desde el domingo... Ah, que buenas palabras entraron a mi cabeza!... Y allá fui, a ver qué nuevos pasos doy con mis botitas antilluvias... Me reencontré con un libro de argentinos autores y abrirlo de nueva cuenta fue salpicarme de sabiduría. Aprender de miradas, de contacto y de letras, puede levantarme de mis camas cómodas pero frías.
Hoy repaso con más calma lo dicho y lo hecho. Ciertamente la mar se ve mucho más tranquila esta tarde. Me he quitado toda mi ropa, la vieja y la sucia y voy entrando con mi mismo cuerpo visto desde otro punto de vista: más suelto, con más baile... Me gusta sentir que no es tan frío y que me recibe sin tanta bravura como antes...
Mis preguntas, las de mi labor profesional y las de mi entorno emocional, van encontrando sus propias respuestas conforme mis pies tocan piedritas y arena caliente... Me asomo al sol bajo mi sombrero y sí, hay mucha más energía y luz que hace tiempo y hay una gran noticia: Esa luz y esa energía han crecido dentro de mi. Nadie vino y me la regaló ni nadie me ha echado la que le sobra. Por fin sé que sólo haciendo lo que más me gusta, mis pies con botas han de moverse de aquí. Pero no hay fecha para ello. No hay fecha que no se cumpla ni fe que no la alcance. Sin duda.
Me pagan mis dineros. Me ahorro mis lágrimas. Me avanzo en el corazón y me pongo orden en la mente... Ah, por supuesto, me goza el alma...
Hay tardes en las que no me hace falta nada ni nadie. Me gusta mi compañía y me gusta mucho más irle entrando a este nueva parte del año sabiendo con más certeza que yo sola avanzo y que habrán muchas más tardes de refugio y de paz por las que vengan de sinrazón y enojo.
Hoy sé que, como diría Max Muto de Michael Ende: "el camino se abre ante mí". Ahora lo que hay que ir cosiendo es el vestido de la constancia y la paciencia.... Por ahí dicen que el que persevera, alcanza.
Hoy leo un blog y se asoman ideas de por dónde puedo también lograrlo. Y más allá leo en una página que cuando uno hace lo que le gusta, tarde que temprano habrá de darse el resultado. Hoy, al ser congruente, me parece que voy obteniendo caminos menos estrechos...
Yo sólo quiero ser congruente. Y que la vida me dé todo lo demás...
Nadia por http://eendar.blogspot.com/... que me disculpe pero esta tarde el talento hay que verlo com libertad...
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