¿DE VERDAD SOY CONGRUENTE?

"Decir lo que sentimos, sentir lo que decimos, concordar las palabras con la vida."

- Séneca -

Pienso, luego existo...Quién sabe quien dijo esto pero viene a colación porque quiero una cosa, digo algo diferente y hago algo muy distinto. Eso no puede ser congruente. Sólo cubro la necesidad inmediata pero ya sé que no va a pasar de ahí por algo tan estúpido como lo superfuo y lo banal, lo que se puede componer o dejar así y no pasará nada con ello.

Lo mediato y lo inmediato. Otra vez el qué dirán de mí, lo que opinará el ser ajeno de mi decisión. Y pesa, a mí me pesa. Creo que dije mucho y no debí. Creo que lo principal es permitirse, darse el chance porque no se vale adelantar el paso y mucho menos el pensamiento.

"Lo esencial es invisible a los ojos". Uno agota sus energías en lo que únicamente se ve con los ojos de la conveniencia, la superficialidad y el egoísmo. Pero la vida viene y nos destruye ese castillo absurdo para , una vez más, ponernos una prueba de humildad y de creencia.

No sólo es permitirse, sino permitirle al otro sólo ser. Sin importar la apariencia o los hábitos. Cualquiera que éstos sean, pueden ser modificados.

Hoy vuelvo a aprender algo en la vida: Que sólo siendo congruente, puedo alcanzar lo que quiero. Pero que también siéndolo, puedo darme cuenta que sólo esto es una oportunidad de saber que en la vida hay sensibilidades, fuerzas, enterezas, gustos y manifestaciones de crecimiento de todos colores y sabores.

Bienvenida la diferencia. Habré de aprender de ello para avanzar.

Habré de aprender de mi falsa humildad y mi narcisismo.